domingo, 1 de febrero de 2009

Cambodia: Los Mejores 5 Días de mi Vida. PARTE III

Pensamientos…..

¿Qué cambio en mi en esos días?

He ido a trabajos del Techo, de Ingeniería, de la Feuc. He visto pobreza en mi vida, pero nunca como la que vi en este viaje. He conocido a gente buena, pero nunca en mi vida a alguien como Samba y su grupo de profesores.

Jóvenes de 23 años que renuncian a todo por ayudar a otras personas. Su motivación en la vida es ver sonrisas en la cara de los niños. Me conmovió profundamente, tanto que hoy en día soy voluntario del Hogar de Cristo y saco a pasear a mis pequeños del hogar Maruri.

Ayudar no cuesta nada, no es necesario renunciar a todo para poder ayudar a los niños de nuestro país. Basta tan sólo con 3 horas de un día sábado. Esas 3 horas son la diferencia para niños que no tienen padres y que viven encerrados en un hogar.

La cara de alegría cuando los visitas, sus gestos de felicidad cuando les haces cariño o la emoción que tienen cuando los sacas de paseo recompensan cualquier tipo de esfuerzo que uno pueda hacer. De hecho siento que ellos me entregan mucho más de lo que puedo llegar a entregarles.

No nos engañemos, ayudar no cuesta nada. Lo único que se necesita son ganas.


Samba y la Escuela Actualmente.


Sigo hablando con mi amigo Samba. En marzo me emocionó muchísimo cuando me contó que había ganado un fondo internacional e iban a hacer una nueva escuela, esta vez de ladrillo y con salas decentes!!!

Hoy en día van voluntarios a trabajar a la escuela, gente de diferentes partes del mundo va y se queda unos días ayudando a mi compadre.

Incluso la escuela tiene una página web. Ahí puedes encontrar foto de la nueva escuela y de los niños.

www.thislifecambodia.org

Bueno, esa fue la historia del primer milagro navideño del que he sido testigo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mr flowers, linda experiencia de vida, ver otras realidades y ser capaz de conmoverte con ellas , ser una persona que se preocupa y ocupa del pojimo habla bién te tí, y de todos los que colaboraron con esos ñiños, que disfrutaron con ellos y se conmovieron con su realidad.